¡Buenas Tardes!
¿Cómo los trata este día jueves? Aquí ha hecho su aparición el solcito aunque solo por poco tiempo ya que mañana esta pronosticado nublado y para el sábado lluvia, así que seguimos con los días ideales para leer.
Hoy quiero compartir con ustedes una entrada diferente, en esta oportunidad les comentaré sobre los libros que he empezado pero que los fui abandonando por diversos motivos. Se convertirá en una sección del blog que iré publicando cada jueves.
La idea es ver si alguien más le ha pasado de abandonar los mismos libros que yo y ver si las razones son las mismas. Puede que se trate de un libro o una saga dejada inconclusa.
En esta ocasión voy a comenzar con El teorema de Katherine de John Green
Según Colin Singleton existen dos tipos de persona: los que dejan y los que son dejados. Él, sin duda, pertenece al segundo. Su última ex, Katherine XIX, no es una reina, sino la Katherine número diecinueve que le ha roto el corazón.
Para escapar de su mal de amores, y con el propósito de hallar un teorema que explique su maldición de las Katherines, Colin emprende junto a su amigo Hassan una aventura que le llevará a Gutshot, un pueblecito de Tennessee, y a la sospecha de que en la vida la inteligencia no siempre es la mejor compañera de viaje.
La crítica ha dicho...
«Una historia afilada e inteligente donde la carcajada oscila entre lo deliciosamente inmaduro y lo sutilmente intelectual.»
Booklist
«Ingeniosa, compleja y enormemente entretenida.»
Kirkus
Título original: An Abundance of Katherines
Autor: John Green
Género: Juvenil
Número de páginas: 320
Este era el segundo libro de John Green que leía, el primero fue Bajo la misma estrella me lo habían recomendado mucho, y dado que el anterior me había encantado, pensé que con este me pasaría algo similar, pero no fue así.
Desde el vamos tuve un rechazo hacía el libro, porque el plantear que se puede "medir" los sentimientos mediante un teorema matemático no me iba, al menos es lo que había entendido de lo que iba la cosa.
Al comenzar conocemos a dos amigos, Colin y Hassan, el primero fue dejado por su novia Katherine la número XIX, es decir la Katherine 19, si, este chico sufre de una fijación por las mujeres que tienen este nombre.
Pensaba que sería una historia divertida por la temática que ofrecía, un viaje para distraerse de la ruptura, dos adolescentes solos rodando en la ruta pero no ... lejos de ser divertida me pareció peor que el sermón de los domingos de la misa cuando era pequeña.
Con unos personajes completamente planos, sin pizca de que una pueda sentirse tan siquiera un grano de arena de simpatía por ellos o identificada por la situación que atraviesa, la lectura se me hizo cuesta arriba.
Al llegar a la mitad y ver que la cosa no mejoraba, pues opte por abandonarlo, pese a todas las recomendaciones sobre este libro, no logró captar mi atención y de hecho hasta me hizo plantearme si de verdad volveré a agarrar un libro de este autor.
Sí me leí las notas finales en donde Green aclara que el teorema fue diseñado realmente por un matemático y un par de detalles más, pero ni aún así volví a tratar de continuar con esa lectura.
Desde el vamos tuve un rechazo hacía el libro, porque el plantear que se puede "medir" los sentimientos mediante un teorema matemático no me iba, al menos es lo que había entendido de lo que iba la cosa.
Al comenzar conocemos a dos amigos, Colin y Hassan, el primero fue dejado por su novia Katherine la número XIX, es decir la Katherine 19, si, este chico sufre de una fijación por las mujeres que tienen este nombre.
Pensaba que sería una historia divertida por la temática que ofrecía, un viaje para distraerse de la ruptura, dos adolescentes solos rodando en la ruta pero no ... lejos de ser divertida me pareció peor que el sermón de los domingos de la misa cuando era pequeña.
Con unos personajes completamente planos, sin pizca de que una pueda sentirse tan siquiera un grano de arena de simpatía por ellos o identificada por la situación que atraviesa, la lectura se me hizo cuesta arriba.
Al llegar a la mitad y ver que la cosa no mejoraba, pues opte por abandonarlo, pese a todas las recomendaciones sobre este libro, no logró captar mi atención y de hecho hasta me hizo plantearme si de verdad volveré a agarrar un libro de este autor.
Sí me leí las notas finales en donde Green aclara que el teorema fue diseñado realmente por un matemático y un par de detalles más, pero ni aún así volví a tratar de continuar con esa lectura.
Y hasta aquí llego con esta entrada, referida a los libros abandonados.
¿Les ha pasado lo mismo con este libro?
¿Han tenido problemas con otros libros de este autor?
¿Qué libros han dejados inconclusos?
Espero que les haya gustado esta entrada.
Les mando un beso enorme.
Y nos leemos prontito.
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